¿Votaciones para dar nombre a estrellas y planetas?
El proceso que inicia la Unión Astronómica Internacional es novedoso por muchas razones, pero sobre todo porque va a ser la primera vez en la historia en que los nombres de diferentes objetos celestes vayan a recibir nombres mediante un proceso participativo de votación entre un público amplio. En otro momento comentaremos de hecho cómo se realiza la nomenclatura de los objetos celestes que se descubren, aunque todos asociamos muchos de esos nombres a los tiempos antiguos.
Y así es: las constelaciones reciben nombres que, en parte, vienen de la antigüedad mediterránea, usándose su versión en latín; gran parte de los nombres propios de estrellas vienen del árabe, aunque algunas aparecen en griego o latín; los planetas recibieron nombres de dioses romanos y los nuevos objetos que se han ido descubriendo en el Sistema Solar han traspasado la nómina de dioses e incorporan también nombres históricos, de personajes muy variados; finalmente (por el momento), los cometas reciben el nombre de las personas que los descubrieron (salvo el Halley, que no fue observado por Edmund Halley, pero quien calculó su órbita).
En cualquier caso, no había un criterio para nombrar planetas de otros sistemas solares, ni siquiera muchas de las estrellas que contienen planetas llevan nombres propios antiguos. ¿Qué hacer? La iniciativa NameExoWorlds («nombremos a los exomundos») partió hace más de un año como iniciativa de la Unión Astronómica Internacional, que comenzó a barajar la posibilidad de nombrar los 305 planetas que se habían descubierto hasta finales de 2008.
La idea fue hacer una propuesta abierta a la colaboración de organizaciones sin ánimo de lucro y clubs y grupos astronómicos, quienes podrían proponer los nuevos nombres, incluyendo también a las estrellas en torno a las que orbitaban (de ahí lo de hablar de «exomundos» y no solo «exoplanetas»). De ahí surgieron diferentes propuestas entre las que, en abril de 2015, se seleccionaron los 20 sistemas más votados, que son los que se someten ahora a este peculiar refrendo.
A partir del 12 de agosto a las 7:30 de la mañana hora peninsular española se podrá votar. La hora corresponde a la presentación del proceso en la Asamblea General de la UAI que se celebra en Hawai (el acto se realiza allí en la tarde del día 11 de agosto, de 7 a 7:30 de la tarde – en el horario de verano tenemos 12 horas de diferencia con las Hawai).
Esa será la hora en la que nuestra candidatura ESTRELLA CERVANTES estará activa y abierta (por lo tanto, lo más probable es que si estás leyendo esto es que ya puedas votar… ¡hazlo antes de seguir!). La información completa sobre la votación y los detalles de cada una de las estrellas y las candidaturas están en la web NameExoWorlds.iau.org.
LAS ESTRELLAS
En la primera vez en la historia que se van a nombrar exoplanetas y algunas de sus estrellas, se han elegido 20 sistemas, los más brillantes entre ellos de los que conocemos, y los primeros que fueron descubiertos hace ya dos decenios. En torno a algunas de estas estrellas se han descubierto varios planetas y por ello el número total de planetas para su designación pública a través de internet es de 32.Hay que hacer notar que no todas las estrellas recibirán un nombre nuevo, porque algunas de ellas ya tienen un nombre aceptado como nombre común por los astrónomos, siguiendo la tradición. Así sucede con Edaish en la constelación del Dragón, Errai en Cefeo, Fomalhaut en el Pez Austral, Ain en el Toro y Polux en los Gemelos.
Son 20 estrellas diferentes por lo tanto, de las cuales 5 conservan su nombre propio y se proponen 15 estrellas para nombrar.
- 15 estrellas que tienen un planeta
- 1 estrella que tiene 2
- 2 estrellas que tienen 3
- 1 estrella que tiene 4 (nuestra estrella Cervantes)
- 1 estrella que tiene 5
Casi todas las estrellas son visibles a simple vista, aunque algunas pocas necesitan de unos binoculares o un pequeño telescopio. La más brillante de todas es la conocida Polux, la gemela de Castor. Y se incluye un púlsar, una estrella de neutrones invisible incluso con grandes telescopios, pero que se detecta en ondas de radio por sus emisiones características y que históricamente resultó, como comentamos en esta entrada sobre la búsqueda de planetas en torno a otras estrellas, el primer hallazgo confirmado de un planeta extrasolar.
PSR 1257+12, en la constelación de la Virgen, se encuentra a 980 años-luz de nosotros y fue en 1990 cuando el astrónomo polaco Aleksander Wolsczan comprobó que tenía unas irregularidades en su periodo de giro achacables a la presencia de un planeta. Las estrellas de neutrones son cadáveres resultantes del fin de estrellas muy masivas, y por eso este hallazgo causó una verdadera conmoción en la comunidad científica. Posteriormente se comprobó que hay otros dos planetas (y recientemente se ha planteado que quizá existe otro más, tan pequeño que sería más bien un análogo a nuestros asteroides o cuerpos menores, aunque aún no está confirmado este hallazgo).
Por cierto, que esto es algo que podría suceder: aunque se han incluido solamente sistemas en los que se sabía que existían exoplanetas descubiertos antes del 31 de diciembre de 2008, la historia de esta joven ciencia astronómica muestra que conforme se hacen más obserevaciones de mejor calidad, y mejoran en exactitud las técnicas de detección y procesamiento de los datos, se descubren nuevos planetas también en sistemas ya con alguno. Esto ha sido así en nuestra misma ESTRELLA CERVANTES: fue a lo largo de varios años que se fueron descubriendo sus cuatro planetas, y cabe pensar que en el futuro tengamos alguno más. Esperamos, por supuesto, que en ese futuro se considere que otros personajes cervantinos sean quienes den su nombre a los nuevos mundos…
(si quieres votar, hazlo aquí: http://nameexoworlds.iau.org/ )